El alarmante número de robos y su creciente sofisticación en los procedimientos requieren nuestra atención para no ser victimas.
Prevención: El primer paso es obvio, no dejar el vehículo en lugares expuestos, con llaves puestas, mal cerrado, con cosas a la vista y sin sitema de protección visible.
Disuasión: La luz intermitente de la alarma, un trabavolante robusto, estacionar en un lugar iluminado y concurrido son elementos disuasivos. El ladrón preferirá otro vehículo.
Obstaculizar el robo. Si el ladrón ya decidió robar, una alarma con cortacorriente o mejor, con llave inteligente con chip, impedirán que se lo lleven andando.
Recuperación: Junto con los métodos anteriores, un sistema que permita que el vehículo parta, pero se detenga en unos minutos o un dispositivo de rastreo permitirá detener el moto a distancia y/o ubicarlo para facilitar su recuperación.
Cualquier método es mejor que nada porque los ladrones suelen preferir vehículos sin obstáculos. Esperamos que estos datos le sean de utilidad. Atte.